que sólo quería ser yo, que no debía llorar
que te daba pena verme así...
Me entendiste, me acogiste
sabías que me dolía esta cotidiana situación...
Pero hoy, tengo que decirte que
vi lo que quería ver,
lloré, pero de felicidad...
Vi el brillo en sus ojos, vi esas luces
de las que el celo me enloqueció,
pero ese brillo era para mí...
Lloré de emoción, amiga fue lo más bello
amiga, era lo que deseaba.
Parecía irreal, por un momento dudé... pero
eran sus ojos, sus manos, que me decían
Parecía un sueño, y yo ruborizada...
tan nerviosa, tan tiernamente embobada.
Amiga, lo hizo... abrió sus ojos para mí
me mostró su amor en ese abrir y cerrar de pestañas,
amiga, él sin querer me hizo un regalo.
Eran sus mariposas amarillas
Eran sus luciérnagas... Estoy segura de que él no sabe,
no se dio cuenta, no descubrió que me hizo la vida feliz.
Hoy duermo con una sonrisa.
0 comentarios:
Publicar un comentario