¿El destino quiere soñar un final feliz?
Si sabemos que anduvimos
por un camino de dos caminos
En tus ojos la nostalgia
de tiempos lejanos,
me sonríes queriendo preguntar
te respondo con tu pregunta
querer lo que tú quieres es mi afirmación
Pero que más da
esas palabras,
inferidas de nuestros rostros,
es la sumisión que el destino nos regaló
El diálogo cotidiano dice un te quiero eterno
un saludos casual es la esperanza de unir caminos
una sonrisa es transportarnos al recuerdo
y definir que fingiremos no ser importantes en nuestras vidas...
Hablar con sentido
sería negar lo que nos hemos convertido
tú una bella y desconocida imagen, yo un extraño.
Sé feliz en tu camino de rosas.
0 comentarios:
Publicar un comentario